Rector de Unicauca invitó a retornar a clases

Por Redacción en octubre 21, 2013

Voceros estudiantiles incumplieron pacto con Consejo Académico

Continúa la anormalidad académica en Unicauca. Mientras una minoría insiste en el cese de actividades y efectuar asambleas permanentes, la mayoría rechaza el paro. Rector llama a retornar a clases.

Según comunicados, correos electrónicos y comentarios en redes sociales, alumnos de Unicauca rechazan el paro, por el riesgo de perder un semestre, el perjuicio económico y por supuestos intereses políticos de los dirigentes del movimiento estudiantil. Estos, a su vez, niegan que obedezcan a la Marcha Patriótica, y dicen que su movimiento responde a la defensa de la universidad pública y a la exigencia de mayor presupuesto.

Entre tanto, el Consejo Académico y el rector de Unicauca, se han pronunciado en sendos comunicados a la comunidad estudiantil y a la opinión pública, frente a la situación que se registra en la Alma Mater.

El fin de semana anterior se conoció un comunicado en el que el Consejo Académico de Unicauca informó que el movimiento estudiantil, que se había comprometido con las directivas universitarias el 16 de octubre a instalar el viernes 18 del mismo mes, la Mesa de Negociación para analizar la “carta de exigencias” que presentó, no cumplió con esa cita pactada.

El mismo viernes 18 de octubre, a través de una comunicación radicada en la Secretaría General, a las 5:00 p.m., el movimiento estudiantil manifestó su decisión de no acudir a la instalación de la Mesa de Negociación, dejando “plantado” al Consejo Académico de institución, que consideró esa actuación como una expresa falta de voluntad política para el diálogo por parte de la vocería estudiantil.

Dirección Universitaria convoca al diálogo y a la concertación

A primeras horas de la mañana de hoy lunes 21 de octubre, se conoció un comunicado del rector de Unicauca, Juan Diego Castrillón Orrego, en el que dice que la Universidad no puede entrar en parálisis para realizar los debates, por lo que se deben crear condiciones de participación y respeto, como casa del pensamiento, en ambientes de normalidad institucional.

Con el propósito de continuar con el desarrollo del II periodo académico de 2013 en los programas de pregrado de Unicauca, hizo un llamado a la comunidad estudiantil a retornar este lunes a las aulas de clases, y establecer, en normalidad académica, los canales de diálogo y concertación con los voceros estudiantiles.

Así lo expresó el directivo, indicando que la administración universitaria no deslegitima a ningún sector estudiantil. “Todos los estudiantes tienen derecho a la libre expresión, al debate de los temas de la realidad institucional, local, regional, nacional y global, pero en ambientes de participación y respeto”, afirmó Castrillón Orrego.

Frente a la carta de exigencias, lamentó que los estudiantes hayan tomado la decisión de no asistir a la mesa de negociación con el Consejo Académico el viernes anterior, espacio que ellos mismos acordaron como un acercamiento para llegar a una solución entre las partes.

Reiteró el llamado a los voceros estudiantiles para lograr procesos de concertación, con los 14 mil estudiantes de Unicauca, quienes tienen diferentes concepciones sobre los temas universitarios.

Alumnos de Unicauca están divididos entre cese de actividades académicas y el regreso a clases. Foto de archivo.

Estudiantes de enfermería no quieren cese de actividades

En carta enviada al rector de Unicauca, Juan Diego Castrillón, estudiantes de quinto semestre de la facultad de Enfermería, le dicen que no comparten la decisión del cese de actividades académicas, la cual se tomó en asamblea estudiantil el 10 de octubre de 2013.

Los alumnos esgrimen cinco razones por las cuales están en oposición: Que en la asamblea estudiantil no se respetaron ni se tuvieron en cuenta los diferentes puntos de vista de muchos de los estudiantes que asistieron, en pro de exigir sus derechos.

Que tampoco se ha tenido en cuenta que están en una universidad pública, a la que asisten personas que no cuentan con los recursos para afrontar un cese de actividades y, que además, podría desembocar en la cancelación de un semestre, situación que los afectaría, tanto económica como académicamente.

Entendemos, dicen, que los rotes hospitalarios son actividades curriculares, pero las instalaciones de la universidad no son necesarias para el desarrollo de las prácticas, motivo por el cual no intervendrán en el desarrollo de las asambleas estudiantiles, las mesas de negociación estudiantil ni en procesos de movilización.

“Respaldados y acogidos bajo el derecho constitucional establecido en el artículo 67 de la Constitución Política de Colombia de 1991 en la cual se nos concede el derecho a la educación”.

“Se necesita, además, el registro total de las notas y de la asistencia a las actividades prácticas a realizar por los estudiantes aquí firmantes”.

Como es notable, argumentan, son muchas las consecuencias desfavorables las que traería consigo un cese de actividades. “Con la continuación de las prácticas académicas lo que buscamos es el bienestar de los firmantes, ya que no compartimos las medidas que se han tomado frente a la problemática universitaria que estamos presentando actualmente”.

Los estudiantes de quinto semestre de Enfermería, anexaron al documento los nombres y apellidos de los firmantes, así como su número de identificación y código universitario.

Estudiantes se pronuncian a través de correos y redes sociales

A diferencia de paros anteriores, en esta ocasión los estudiantes que no están de acuerdo con el cese de actividades, lo vienen manifestando a través de correos electrónicos y redes sociales.

Además, son duros críticos de los “voceros estudiantiles”, pues dicen que la verdadera agenda del paro tiene como objetivo paralizar la universidad y que están utilizando el matoneo para imponer su voluntad.

Agregan, que para presentar la carta de exigencias son un “movimiento”, y que a la hora de asumir su responsabilidad son tan solo un “espacio de reflexión”.

“Todo el caos es motivado por una corriente política denominada “La Marcha Patriótica”, afirman.

Hacen, igualmente, un llamado a los padres de familia para que reflexionen acerca de varios aspectos, como: ¿Quién les va a devolver el dinero de la matrícula? ¿Quién les va a devolver el dinero de la manutención de sus hijos? ¿Quién les va a devolver el tiempo perdido?

Esas preguntas también se las hacen a los estudiantes, además les dicen: “Qué sacan con apoyar un supuesto movimiento que tiene como fin un objetivo político, el cual ambiciona ganar espacios y adeptos tomando como caballito de batalla la supuesta defensa de la educación superior?

Agregan, que a los profesores ocasionales y de cátedra, ¿quién les va a devolver el tiempo perdido por dedicación a exámenes, talleres, trabajos? ¿Quién les va a devolver el dinero que no les pagarán por el cese de actividades? ¿Cómo les garantizan a sus familias un buen final de año sin trabajo?

Por todo lo anterior, ¿quién responde? Concluyen.

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