¿Popayán ideal?
Por Alberto Muñoz Olano
Varios lectores habrán entendido el título y sabrán que es la frase usada por la administración del Alcalde Fuentes para preparar el difícil camino de actualización del Plan de Ordenamiento de Popayán, POT.
Pero, pocos se han dado cuenta de que este año es el más importante para Popayán en una década, porque el POT define el futuro de la ciudad que afecta directamente a cada ciudadano.
¿Por qué incide en todos los habitantes? Sencillo. Por ejemplo, si usted vive en un barrio residencial y por efectos del POT cambia el uso del suelo a comercial o mixto, la zona donde seguramente creció y conoce a todos los vecinos se convertirá de un apacible y tranquilo lugar, en un ruidoso, desordenado y congestionado barrio comercial, con vehículos parqueados por todas partes, vendedores ambulantes invadiendo las esquinas, impidiendo la visibilidad y maleantes acechando. Seguramente sus vecinos empiecen a vender sus casas para vivir en un lugar más tranquilo, enajenando tal vez a buen precio lo que fue su hogar. Pero el nuevo dueño traerá consigo un proyecto comercial, con ello clientes que llegarán a pie, en bicicleta, moto o carro, pero lo que fue una casa con un garaje para uno o dos carros, de pronto va a necesitar 10 o 20 puestos para los clientes, y seguramente no habrá lugar y parquearán sobre la calle. Pero el barrio, planeado para la movilidad de unos cuantos vehículos y no para parqueadero público, colapsará. Si además la casa que fuera de su vecino la convierten en bar o discoteca, entonces el problema crece de ocho horas diarias a 24 horas.
Pero digamos que los habitantes se unan y luchen por conservar el uso residencial del barrio. Sin embargo existe el riesgo de que a su vecino le compren la casa para construir un edificio de 6, 7 u 8 pisos, de 20 a 50 apartamentos. Así se conserve el uso de suelo, el problema de movilidad aumentará, porque 50 apartamentos nuevos en el barrio, equivaldrán a por lo menos 80 vehículos más. Peor si se construyen en la misma zona unos 10 edificios. ¿En Dónde guardarían los 800 carros nuevos en un barrio con las mismas vías estrechas, además del transporte público y las motocicletas?
Entonces, se afectaría la vida de cada habitante, sin contar que ese barrio en un principio se “valorizará”, pero cuando los nuevos problemas aparezcan, probablemente en poco tiempo se deprimirá.
Otro aspecto importante es el área urbana de Popayán, que durante las últimas dos décadas es la misma para una población un 60% mayor, con 20 empresas constructoras deseosas de comprar lotes disponibles a precios razonables, que por cierto se están agotando, y por eso buscan predios y construyen en zonas alejadas del caso urbano, a donde se deben llevar servicios públicos, entre ellos de acueducto y alcantarillado. Esto hace que la ciudad crezca de forma desordenada, tanto así que en este momento se está urbanizando la variante, una vía construida precisamente para evitar que el tráfico de vías nacionales interfiriera con la movilidad de la ciudad y la tranquilidad de las zonas urbanas. ¿Quién entiende eso?
Lo más difícil de entender es que la zona plana, más bonita, con capacidad para construir la nueva Popayán, incluyendo áreas residenciales y comerciales, aún sea rural. No porque los dueños de Genagra o los descendientes del presidente Valencia no quieran vender, claro que quieren, pero no lo harán hasta cuando se desarrollen las vías y se diseñen reglas claras, donde todos ganen. Por eso los invito a que sean parte activa de la formulación del POT. Para mayor información entre a www.popayanideal.com, después no se quejen.
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