Misa del Carguero y Orden de la Alcayata

Por Redacción en marzo 30, 2015

Al veterano carguero Mario Córdoba, se le impondrá el Escudo de Oro de la Junta Permanente Pro Semana Santa.

El Lunes Santo se oficiará la tradicional Misa del Carguero, oficiada por el arzobispo de Popayán, monseñor Iván Antonio Marín López, a la que asistirá toda la familia semanasantera.

A continuación de la ceremonia religiosa, monseñor Marín López y la Junta Pro Semana Santa, les impondrán la condecoración de la alcayata de Oro en calidad de Decanos, a Ignacio Angulo Rojas, Gabriel Cayetano López Ramírez, Miguel Calderón, Mauricio López Quintero y a Felipe Vicente Segura Fernández. Recibirá la Alcayata de Oro Marco Antonio Arias Sánchez. La Mención de Honor será para la familia Velasco Arboleda por sus 50 años en la sindicatura del paso Cruz a Cuestas.

Mario Córdoba Castillo, será reconocido por los servicios prestados a la Junta Pro Semana Santa y a la tradición payanesa.

El Escudo de Oro para Mario Córdoba
La Junta Permanente Pro Semana Santa, decidió otorgar la condecoración Escudo de Oro, a Mario Antonio Córdoba Castillo, como reconocimiento a sus invaluables servicios prestados a la institución desde el 10 de febrero de 1978 a la fecha.

Este veterano carguero ha sido presidente de la Junta durante varios períodos 1990-1992; 1992-1994; 1998-2.000 y es actualmente el tesorero de la entidad.

En el año 2001 recibió la Alcayata de Oro en su calidad de decano y ha sido síndico del paso La Magdalena de la procesión del jueves santo durante el período 1975-1985 y a partir de ese año es el síndico del paso Nuestra Señora de la Virgen de los Dolores de la procesión del martes santo.

Córdoba Castillo cargó durante 44 años, hasta el 2001 y durante 37 años ha estado vinculado a la Junta. En el 2002, luego de trabajar en varias empresas de Popayán, y cuando dirigía el departamento de Bienestar Universitario de la FUP, se pensionó y desde esa época se dedicó de tiempo completo a la Junta Pro Semana Santa, obviamente ad honoren.

Haber sido carguero y pertenecer a la Junta, tiene para él un significado espiritual y un compromiso con la tradición. Sus afectos más íntimos son por los pasos de la Virgen de Los Dolores del Martes Santo, por la crucifixión del Jueves y por Las Insignias del Viernes Santo. En esos tres pasos no solo él ha cargado, sino toda su familia. Hoy tienen barrote sus hijos Mario Andrés y José Fernando.

Además de las condecoraciones ya anotadas, le han otorgado El Carguerito de las Procesiones Chiquitas, de la Fundación Pedro A. Paz; el Corazón y la Daga, concedido por el Consejo Parroquial de la iglesia de San Agustín; el Escudo de Popayán, entregado por el entonces alcalde José Gabriel Silva a todos los miembros de la Junta.
Dice que la Junta está lista con sus cargueros, síndicos y párrocos para llevar a cabo otra versión de las históricas procesiones y espera que la ciudad corresponda para continuar diciéndoles al país y al mundo que Popayán es una ciudad de paz y que la Unesco confirme que los payaneses son responsables de mantener la catalogación de sus procesiones como Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad.

publicado en la edición impresa del 27 de marzo de 2015

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