La tempestad del 31 de octubre ocasionó graves emergencias en Popayán y cobró la vida de una niña

Por Redacción en noviembre 1, 2022

Cuerpo de Bomberos demanda colaboración de usuarios de las vías, para que permitan el tránsito de ambulancias de las entidades de socorro.

El torrencial aguacero que se registró el 31 de octubre en Popayán, ocasionó graves daños en viviendas, dejando a muchas familias sin sus enseres.

En distintas zonas de la ciudad se registraron inundaciones, deslizamientos de terrenos, en especial en zonas de alto riesgo en donde se asientan familias que, necesariamente, las autoridades locales deben reubicar para prevenir nuevas tragedias.

Dada esta calamitosa situación, la Oficina Asesora de Gestión del Riesgo Municipal, el Cuerpo de Bomberos de Popayán y otros organismos de socorro desplegaron su capacidad operativa para atender a los damnificados.

Germán Callejas, jefe de la Oficina de Gestión del Riesgo, informó que en Popayán se registraron muchas afectaciones tanto en la zona urbana como en la rural.

Agregó, que en el asentamiento Samuel Silverio Buitrago, ubicado al sur de la ciudad, colapsó la cubierta de una terraza; en la vereda González, en donde se levantan humildes casas en zonas de alto riesgo, se presentaron deslizamientos e inundaciones; igualmente, en el sector de Camino Viejo, en la vía Coconuco en el kilómetro nueve.

También se presentaron inundaciones en Guayacanes del Río, Las Guacas, Bello Horizonte, en la vereda de Prieto y en el barrio Aida lucía. Varios árboles cayeron en la quebrada La Cantera, en el sector de San Ignacio y en el antiguo Hospital del Norte; en el barrio Campamento colapsaron las cuerdas de energía y en la urbanización Asturias se reportaron dos postes en riesgo de caer.

Tragedia

En el sector de la Calera, zona rural del municipio de Popayán, la niña Camila Sánchez Medina, de 9 años, que transitaba con su papá, resbaló y cayó a la quebrada La Calera. Su familia le practicó los primeros auxilios, luego fue trasladada a la clínica La Estancia, a donde llegó sin signos vitales, los facultativos hicieron todo lo que estuvo a su alcance por reanimarla, pero, por desgracia, la pequeña falleció, tal como lo reportó el propio comandante del Cuerpo de Bomberos de Popayán, Juan Carlos Gañán.

El capitán Gañán dijo que, desafortunadamente dos deslizamientos de tierra en la zona impidieron trasladar a la niña de forma más rápida.

El Cuerpo de Bomberos Voluntarios ha mostrado preocupación, debido a que los organismos de socorro y las ambulancias no pueden transitar rápidamente por las vías de Popayán, porque ciudadanos inconscientes no permiten el paso de esos vehículos, impidiendo que lleguen a tiempo a atender emergencias y salvar vidas.

El 31 de octubre, día de terrible tempestad en la ciudad, los bomberos atendieron 21 emergencias.

Por otra parte, el río Molino fue declarado en alerta amarilla, pero recuperó su cauce y continúa bajo monitoreo constante. El río Cauca ha estado muy caudaloso a su paso por Popayán.

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