La mitad de la economía colombiana depende de tres departamentos

Por en junio 5, 2024

El crecimiento económico nacional fue de 0,6% en 2023, con una desaceleración notable en el segundo semestre. La contribución del Cauca fue negativa.

  • Los resultados regionales publicados por el DANE revelan las contribuciones de distintos departamentos al PIB.
  • Bogotá, Meta, Santander y Cesar impulsaron el crecimiento económico gracias a sus sectores productivos sólidos, mientras que departamentos como Cauca y Arauca tuvieron contribuciones negativas debido a la contracción en la industria y el comercio.
  • Bogotá, Antioquia y Valle del Cauca han concentrado históricamente cerca de la mitad de la producción económica nacional. Esto evidencia la gran heterogeneidad regional en la capacidad productiva de esos departamentos y de las demás regiones del país.
  • La dependencia de pocos departamentos en el crecimiento económico nacional puede aumentar la vulnerabilidad de la economía, pues dificultades económicas en uno de estos departamentos tendrían un impacto significativo en la economía nacional. Resulta fundamental implementar políticas públicas que promuevan el desarrollo equitativo y sostenible, que contribuirían a reducir la divergencia regional en Colombia.

El cierre de 2023 estuvo marcado por un tímido crecimiento anual de 0,6% a nivel nacional, conforme a la dinámica de desaceleración que se presagiaba desde el primer semestre y que se acentuó en la segunda parte del año, registrando incluso una contracción durante el tercer trimestre. Aunque ya se conocían los resultados agregados, la semana pasada el DANE publicó los resultados regionales, los cuales permiten hacer un análisis más profundo y detallado del comportamiento de la economía el año pasado. Así pues, a continuación, se presentan los resultados del PIB departamental a cierre de año, donde se examina cuáles fueron los departamentos que más impulsaron la economía nacional.

Al considerar la contribución de los departamentos al crecimiento económico nacional, que no solo tiene en cuenta su participación en el PIB, sino también el crecimiento económico individual, es posible destacar características puntuales de cada uno de ellos. En un año de ajuste macroeconómico como 2023, en el cual las participaciones de los departamentos se mantuvieron relativamente constantes, mayores contribuciones al crecimiento estarían asociadas a departamentos con estructuras productivas sólidas.

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Por ejemplo, como es usual, Bogotá concentró alrededor de una cuarta parte de la producción nacional y registró un crecimiento en línea con el agregado nacional, con lo cual aportó 0,15 puntos porcentuales (pp) al crecimiento total. Esto se explicó principalmente por su rol como centro administrativo y financiero.

Meta, por su parte, tuvo una contribución de 0,14pp, gracias al buen desempeño de sectores como el petroquímico y el agroindustrial, que le permitieron tener un crecimiento sobresaliente de 3,6% anual.

Asimismo, Santander (0,06pp) y Cesar (0,05pp) contribuyeron positivamente, gracias al buen comportamiento de los sectores industrial, agropecuario y minero. En contraste, algunos departamentos presentaron contribuciones negativas al crecimiento económico, explicadas principalmente por la contracción en la industria y el comercio.

Entre estos se destacan Cauca (-0,01pp) y Arauca (-0,01pp, donde al mal desempeño del comercio se sumó un menor dinamismo de la actividad minera). Al analizar los resultados del PIB total con base en la participación de los departamentos al crecimiento total nacional, se observa que cerca de la mitad de la actividad económica estuvo explicada por las tres regiones más grandes del país: Bogotá, Antioquia y Valle del Cauca. Esto no es una sorpresa. Si se analiza la participación histórica que tienen los departamentos en la producción total de la economía, se encuentra un comportamiento estable para la mayoría de los departamentos a lo largo del tiempo. Solo entre Bogotá (25%), Antioquia (15%) y el Valle del Cauca (10%) se ha producido alrededor de la mitad de la producción total de los bienes y servicios en Colombia. La estabilidad en estos porcentajes indica una concentración histórica del desarrollo económico en estas regiones y evidencia la gran heterogeneidad regional en la capacidad productiva de esos departamentos y de las demás regiones del país.

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