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La improvisación en la Paz Total pasará factura a los caucanos

Por Redacción en septiembre 18, 2024

Por Óscar Rodrigo Campo

Representante a la Cámara por el Cauca

La situación del Cauca está más crítica que nunca y exige al Gobierno nacional que asuma con seriedad y responsabilidad su rol en la protección de los derechos de los ciudadanos en medio de esta crisis.

Es momento de reconocer que los diálogos con el ELN han sido infructuosos y que es imposible lograr la paz con quienes no están dispuestos a hacerla. La realidad para departamentos como el Cauca, lejos de mostrar avances en la sustitución y transformación de las zonas más afectadas por el conflicto, están más sumidas que nunca en la ilegalidad, la violencia y la ausencia de autoridad institucional.

El balance del proceso de Paz Total revela que, a día de hoy, ninguno de los frentes armados que operan en el Cauca se encuentra en negociaciones con el Gobierno, lo que refleja preocupante falta de control por parte del Estado en el territorio. Además de la inexistencia de garantías de un verdadero Estado de Derecho para una gran parte de la población caucana.

El Cauca está en su peor momento, los recientes informes de la Defensoría del Pueblo, indican un alarmante aumento en los desplazamientos, confinamientos forzados. La población civil se encuentra atrapada entre múltiples fuegos: los frentes de disidencias, el ELN, la Segunda Marquetalia y, en algunas áreas, la fuerza pública que ha intensificado las operaciones en zonas como el Cañón del Micay.

El ELN está en 13 municipios del Cauca, el EMC en 31, la Segunda Marquetalia en cuatro y hay panfletos de otros grupos en, al menos, nueve municipios; cabe recordar que el Cauca tiene 42 municipios, es decir, que los grupos armados están en la mayoría del territorio.

Hacemos un llamado al Gobierno nacional a través de la institucionalidad, especialmente a la Unidad para las Víctimas, a fin de que asuma un papel proactivo y de liderazgo en la atención a la población civil afectada.

La improvisación en el marco de la Paz Total, está cobrando una alta factura en términos de seguridad y convivencia para los caucanos y el Gobierno no da asomos de estar preparado para asumir el control.