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Era un proyecto a la topa tolondra

Por Redacción en noviembre 14, 2018

Opinión por: Aura Isabel Olano

En octubre pasado este portal publicó un comentario del director del Observatorio de Infraestructura de la Cámara de Comercio del Cauca, ingeniero Andrés Castrillón Valencia, en el que advertía acerca del error que sería construir un intercambiador vial en el sitio conocido como la Piedra Norte en Popayán, para hacer un empalme entre la carrera 9ª (Panamericana) y la carrera 6ª (por intermedio de la Calle 57 N), obra que había sido propuesta por el alcalde César Cristian Gómez, dentro del cupo de endeudamiento que por $ 75.000 millones le autorizó el Concejo Municipal.

Es verdad que a Popayán le faltan vías, especialmente hacia el norte, sector que se viene urbanizando de manera acelerada, por lo que la movilidad es lenta y la accidentalidad se incrementa, pero no se pueden presentar proyectos a la ‘topa tolondra’ como era ese caso, sin los respectivos estudios ni diseños. Tampoco se presentaron otras alternativas a la que se planteó a mano alzada, sin planeación alguna, y que de manera alegre e irresponsable los señores concejales aprobaron, proceder que, además de censurable, muestra falta de ponderación, de examen, de estudio por parte del Concejo de la ciudad, que va aprobando proyectos como si fuera tan solo una comisión de aplausos del Ejecutivo, olvidando su verdadera función.

Esto es grave y sirve para que la ciudanía tome conciencia acerca de la responsabilidad que le asiste al elegir a los concejales y, por supuesto, al nuevo alcalde, que deben ser personas preparadas, formadas, estudiosas, con visión de ciudad, no agitadores de barrio que se autodenominan líderes sociales o empresariales que convencen en las campañas con dádivas a un electorado poco informado que se deja comprar, incluso, con baratos electrodomésticos.

El Municipio estuvo a punto de intervenir la mencionada intersección, supuestamente para “mejorar las condiciones de movilidad del sector”, cuando habría sido lo contrario, puesto que complicaba más el problema existente, o sea, que peor era el remedio que la enfermedad, porque tampoco había evaluación técnica ni económica que arrojara una evidencia cierta de que ese improvisado proyecto resolviera el lío del tráfico automotor en ese sector.

Hay otras alternativas, verbigracia la propuesta de la propia Veeduría de Infraestructura de la Cámara de Comercio, como es la construcción de un intercambiador a nivel, entre el extremo norte del nuevo puente metálico sobre el río Cauca (Colegio Gabriela Mistral) y la parte baja de la Loma de las Cometas (Hacienda Belalcázar), en donde ya está definido un corredor de cesión sobre el colector de aguas negras que viene desde Ciudadela La Paz, que conduce a la que será la nueva PTAR de la ciudad, si esta vez la dejan construir. Obviamente, hay que analizar de manera juiciosa, con estudios serios esa y otras opciones, no es posible seguir presentando proyectos improvisados para comprometer importantes recursos que vienen del empréstito que el Concejo le aprobó al alcalde.

Me estoy refiriendo en pasado a ese proyecto que, por fortuna, y luego de las críticas constructivas hechas en este portal, se ha desechado. La propia secretaria de Infraestructura de Popayán, la ingeniera María del Pilar Huetia, se lo informó al director de Infraestructura de la Cámara de Comercio, Andrés Castrillón Valencia, quien dijo en su comentario de LA Campana, que era un “error evitable”, y por el bien de la ciudad se ha corregido, porque se percataron, menos mal, de que técnica y económicamente el pensado interconector no era viable.

Tenemos que resaltar que se haya tomado en cuenta la recomendación hecha desde este medio de comunicación y que sirva de experiencia para que la Administración Municipal no siga lanzando iniciativas sin análisis y que el Concejo no le continúe extendiendo al alcalde cheques en blanco.

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