Consolidar la calidad, propone Edgar Velásquez, candidato a la Rectoría de Unicauca

Por Redacción en marzo 21, 2017

Modernización administrativa, fortalecer la investigación, afianzar la oferta educativa y reacreditación institucional, forman parte de la propuesta rectoral.

El actual vicerrector Académico de la Universidad del Cauca, Edgar de Jesús Velásquez Rivera, posdoctorado en Historia, quien está en la baraja de candidatos a la Rectoría de la Alma Máter, de la cual el Consejo Superior elegirá el 4 de abril al sucesor de Juan Diego Castrillón Orrego, dialogó con el periodicolacampana.com sobre algunos aspectos que aspiraría ejecutar si logra ser escogido para dirigir esa legendaria institución.

Su propuesta se denomina ‘Universidad del Cauca: Consolidar la Calidad para Construir País’.

L.C. De llegar a ser elegido rector de la Universidad del Cauca, ¿qué quisiera que se recordara de su gestión?

E.V.R. Como una rectoría incluyente, que defendió la universidad pública, que tuvo las mejores relaciones con los docentes, con los trabajadores y administrativos; una rectoría que consolidó la calidad de toda la oferta que tiene la Universidad del Cauca, que garantizó y logró la reacreditación institucional, que la puso entre las mejores del país. Así nos gustaría que se nos recordara por parte de la comunidad universitaria y de la ciudadanía en general después de nuestro paso por la rectoría de la Universidad del Cauca.

L.C. Usted ha planteado fortalecer la planta profesoral, ¿cómo lo lograría y con qué objetivo?

E.V.R. El estamento docente es una de las principales variables que tiene mayor peso específico en los estándares de calidad de cualquier universidad, por eso nuestra preocupación y propósito es ampliar la planta profesoral de la Universidad del Cauca y, para lograrlo, es importante gestionar nuevos recursos en los ministerios de Educación y de Hacienda, a efectos de hacer periódicos concursos docentes de planta con el objeto de fortalecer el talento humano en la institución.

L.C. La Universidad del Cauca no escapa a la tramitomanía que hay en el sector público. ¿Usted qué haría para hacer más ágiles los procesos y procedimientos, además generar más compromiso entre los funcionarios?

E.V.R. Estamos proponiendo una modernización administrativa para desconcentrar los trámites, a veces innecesarios que se enquistaron en muchas estructuras de la Universidad del Cauca. Queremos hacer una gestión que sea más amigable con la ciudadanía, con el estudiante, el padre de familia, el contratista y con el docente. En el marco de la reforma administrativa hay, por ejemplo, que definir los términos de un manual de funciones, pues cuando este existe, todos los miembros de una institución tienen seguridad, certeza, saben en dónde empiezan sus responsabilidades y en dónde terminan, eso nos evita improvisaciones, dificultades, incluso en las relaciones entre las personas. La modernización administrativa tiene en ese sentido que ganar consciencia en todos los estamentos, en el sentido de hacer más eficiente y eficaz la gestión de la universidad.

L.C. Hay funcionarios que inventan normas e impiden que los trámites sean más expeditos, ¿qué haría usted que la Universidad fuera más ágil?

E.V.R. Tenemos que lograr un ambiente de confianza entre los universitarios, que parte por señalarle al funcionario que la modernización administrativa no es para despedir gente, ni en modo alguno para hacer traslados arbitrarios o desmejorar las condiciones del personal; por el contrario, una reforma administrativa nos permite tener relaciones más equilibradas, más armónicas y, sobre todo, unas relaciones que se afiancen en la confianza y defensa de lo público. Esta es una labor que se debe hacer con los funcionarios, trabajar con ellos para ganar su voluntad y hacer de la Universidad del Cauca una sola. No nos podemos inventar normas o trámites que en algunas ocasiones enrarecen, dificultan y traban el buen desarrollo de la institución.

El 4 de abril el Consejo Superior de la Universidad del Cauca, elegirá Rector para el período 2017-2022

En cuanto al clima organizacional, queremos hacer una revisión acuciosa y crítica sobre qué hacen las personas, cuál es el impacto de su ejercicio cotidiano. Eso, indudablemente, tiene que ver con lo que hemos reiterado: establecer un manual de funciones en el contexto de la reforma administrativa, con el objeto de hacer de la Universidad una institución moderna, ágil y segura, que le dé a cada funcionario la certeza de que las decisiones que tome estén amparadas por un ambiente de seguridad, eficiencia y eficacia.

L.C. La investigación es la columna vertebral de la academia, ¿qué propone usted para que la investigación que hace la Universidad del Cauca, además de ser de calidad, le sirva a la comunidad?

E.V.R. Efectivamente, los docentes de las universidades públicas solemos laborar en tres escenarios: la docencia propiamente dicha, la interacción social y la investigación. Asumimos que la investigación es el insumo, la materia prima para nuestro ejercicio docente y para la interacción social. La Universidad del Cauca le ha dado siempre una enorme importancia a la investigación, queremos ampliar y profundizar el tiempo que los docentes le dedican, pero también queremos llegar a un segmento importante de colegas con título de doctor que no adelantan proyectos de investigación, para que los lideren.

La investigación que se genera en la Universidad del Cauca tiene que llegar a la población, como la que se hace en Ciencias de la Salud, para incidir favorablemente en la solución de problemas concretos de las comunidades económicamente más vulnerables.

Queremos que la investigación sea publicada y que le llegue a la gente. Esa es, entre otras, una manera de cómo la universidad se legitima frente a la sociedad a la cual se debe.

En materia de investigación también estamos proponiendo que los mejores trabajos de grado de los estudiantes sean publicados y se difundan como un reconocimiento a la excelencia, también como una forma en que la Universidad contribuye a la solución de problemas concretos de la población. Es nuestro deseo que la investigación que produce la Universidad pueda incidir favorablemente en el desarrollo industrial del Departamento del Cauca.

L.C. Para aumentar la investigación se requieren más recursos económicos y tecnológicos, ¿qué haría usted para conseguirlos?

E.V.R. La Universidad del Cauca, por fortuna, tiene una importante tradición en materia de investigación. No partimos de cero, hay grupos y líneas de investigación consolidados, reconocidos en los ámbitos nacional e internacional. Creemos que la Universidad debe hacer importantes inversiones en laboratorios e infraestructura en ciencias básicas y en ciencias de la salud, que nos permitan impulsar investigaciones de punta, que la sitúen como una institución líder en materia de generación del conocimiento y transferencia de ciencia y tecnología.

L.C. La Deserción estudiantil es un problema serio en las universidades y la del Cauca no escapa a esta situación. ¿Qué plantea usted para reducirla?

E.V.R. Lo primero que hay que señalar es con quién trabajamos. Lo hacemos con estudiantes que llegan a la universidad con problemas en las habilidades básicas del lenguaje: hablar, leer, escribir y escuchar. La Universidad no puede ignorar esas particularidades de nuestra población estudiantil, debe tener un conocimiento concreto del estudiantado. Ese es un elemento esencial para poder diseñar políticas que nos permitan reducir las tasas de deserción, de morbilidad estudiantil, y, sobre todo, en algunos programas las altas tasas de no graduación.

Edgar de Jesús Velásquez Rivera, candidato a la Rectoría de Unicauca.

Cuando conocemos las calidades y las características de los estudiantes nos resulta más fácil diseñar estrategias. No todos los estudiantes aprenden al mismo ritmo, por lo que es importante conocer cuáles son sus competencias, cuáles son sus inteligencias, el ser humano no es inteligente para todo, podemos tener unos desarrollos más grandes en materia de aprendizaje en unas disciplinas que en otras. Eso significa, sencillamente, que hay que identificar cuáles son las fortalezas y las debilidades de los estudiantes, y a partir de ese diagnóstico concreto, empezar a adoptar estrategias para mejorar la forma de cómo el estudiante aprende, no hay estudiantes brutos, no hay estudiantes ignorantes. Simplemente, que aprenden de manera diferenciada y la universidad tiene que conocer primero a esa población, antes que aventurarse a especular sobre mecanismos para corregir los problemas.

L.C. Otro problema común a todas las universidades es el consumo de sustancias psicoactivas, y en Unicauca es preocupante. ¿Qué alternativas se podrían adoptar para hacerle frente a ese flagelo?

E.V.R. El fenómeno de la adicción a las sustancias psicoactivas y a la ludopatía son tragedias que le asisten a un número considerable del estudiantado universitario colombiano, y la Universidad del Cauca no es la excepción.
Frente a esos fenómenos, las medidas para superarlos tienen que ser integrales. En primer lugar nos interesaría tener una relación muy estrecha con los padres de familia, es probable que muchos no sepan que sus hijos son adictos y que lo hacen en la universidad. Establecer una relación con ellos, no para ponerles quejas ni hacerles juicios de responsabilidad, sino para convertirlos en aliados y sacar a esa persona que ha caído en tan lamentable situación.

Mi propuesta rectoral contempla el programa ‘Universidad de Tiempo Libre’, en el que los estudiantes serán objeto de atención especial, proporcionándoles actividades y certámenes culturales, deportivos, artísticos, lúdicos y creativos para que inviertan su tiempo libre. Ese mecanismo es efectivo y en algunas universidades europeas ha dado un gran resultado para prevenir la adicción, tanto a las sustancias psicoactivas como a la ludopatía.

L.C. La universidad pública tiene un déficit muy alto, se habla de $800 mil millones, de llegar usted a ser rector, ¿qué le propondría al Gobierno Nacional y a los demás rectores para subsanar ese faltante y conseguir recursos nuevos?

E.V.R. Las universidades estales colombianas están en una evidente contradicción, por un lado se les exige ampliar la cobertura, pero por otro, se les somete a una especie de asfixia presupuestal. Somos del criterio que el déficit presupuestal crónico estructural por el que atraviesa la universidad pública debe ser un asunto de política de Estado, esto no se resuelve con simples aleatorios y ocasionales giros a cada universidad, el Gobierno Nacional tiene que entender, más temprano que tarde, la importancia de la definición de una política universitaria que permita superar de manera estructural esas dificultades.

La Universidad del Cauca en solitario no va a resolver ese problema, tenemos que actuar de manera conjunta frente a las autoridades del orden nacional, una intervención en esa materia puede dar buenos resultados para poner a las universidades públicas en el sitial que les corresponde.

En esa materia es importante reconocer que la Universidad del Cauca, comparativamente con otras instituciones, no registra graves deficiencias presupuestales, esto en virtud de la responsabilidad y del manejo serio que le han dado a las finanzas las distintas administraciones.

Nos mantendremos en la línea del manejo pulcro de las finanzas, crecer con responsabilidad y tomar decisiones a partir del realismo y de la seriedad institucional, que no ponga a la Universidad en la autopista de la quiebra financiera.

L.C. ¿Unicauca es de las pocas universidades públicas que no tiene déficit presupuestal?

E.V.R. Exactamente. La Universidad del Cauca se caracteriza a nivel nacional por ser una de las universidades que no tiene déficit presupuestal. Ningún docente está preocupado por si se le paga o no su sueldo, tampoco es preocupación de los trabajadores ni de los administrativos, no hay dificultades. Esa es una herencia que recibimos de las anteriores administraciones. Una decisión demagógica o precipitada puede marcar el inicio del descalabro financiero de la universidad y nosotros no queremos ser esos personajes.

L.C. Además de su hoja de vida, de su experiencia académica, ¿qué ejecutorias como vicerrector académico lo respaldan?

E.V.R. En materia administrativa he tenido la oportunidad de ser jefe del Departamento de Historia, coordinador de la Maestría en Estudios Políticos Latinoamericanos, decano encargado de la facultad de Ciencias Humanas, director del Centro de Posgrados, vicerrector Académico y de manera reiterada, rector delegatario y rector encargado.

En el Centro de Posgrados demostramos eficiencia y eficacia con resultados concretos en materia de crecimiento de la oferta de programas, nuestro paso por la vicerrectoría Académica ha sido una fenomenal experiencia desde la cual hemos podido liderar la acreditación de alta calidad de más de una veintena de programas de pregrado, participado en la creación de nuevos programas de posgrado, en la creación del primer posdoctorado que tiene la Universidad Cauca, hemos dado una orientación de mucha responsabilidad en términos de la asignación de la labor académica.

También nos ha sido grato desde la vicerrectoría académica, haber propiciado el mejoramiento de los términos de vinculación de los docentes ocasionales, es decir, en la práctica administrativa universitaria hemos comprobado que tenemos la suficiente capacidad, el talante, el liderazgo y el don universitario para liderar los destinos de esta importante institución.
Con nuestra gestión rectoral la Universidad del Cauca continuará la senda de crecimiento responsable en toda su oferta educativa; nadie será excluido de esta importante convocatoria que le hace el país a la Universidad en términos del posconflicto. Recordemos que la Universidad del Cauca es testigo del crecimiento del Estado- Nación colombiano, y hoy en día no puede ser inferior, no lo ha sido frente a los enormes desafíos que le interpela el posconflicto. Nuestra institución tiene que dar respuestas ciertas a las exigencias, por ejemplo, en el nuevo contexto geopolítico del país, qué va a plantear en materia de educación.

L.C. Y en ese contexto, ¿qué tiene previsto para una nueva formación en el Cauca, que se pueda aportar al país en el posconflicto?

E.V.R. Hemos adelantado conversaciones con la Gobernación del Cauca y la Alcaldía de Popayán, en cuyos planes de desarrollo hay importantes temas desde los cuales podemos fortalecer, como es el de la calidad de la educación. La Universidad del Cauca puede, tiene y debe intervenir de manera directa en el mejoramiento de la calidad de la educación que reciben los estudiantes en los municipios y zonas rurales del Cauca. Por otro lado, reiteramos, que la Universidad del Cauca debe ofrecer alternativas en materia de capacitación a los desmovilizados, en el contexto del proceso de paz. La clave del éxito de esa oferta educativa radica en que esta sea el fruto del consenso entre los interesados y la universidad. No podemos hacer una oferta general, tenemos que conocer cuál es la población, el nivel de escolaridad y las expectativas que en materia de formación tienen los desmovilizados, y ahí sí formular las alternativas de capacitación.

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