Nubarrones para el turismo caucano

Por Redacción en agosto 24, 2016

Mientras otras regiones de Colombia se adentran juiciosamente en volverse más competitivas y encaminar acciones concretas y puntuales para aprovechar las múltiples posibilidades que en materia de turismo acarreará el posconflicto, el Cauca se adentra en un cúmulo de situaciones que presagian ser más adversas que positivas.

Por Julio A. González Díaz
Empresario Turismo Norte Caucano
e-mail: juligonza09@gmail.com

Para nadie es un secreto que cuando se realizaba el proceso de selección para quienes aspiraron a ocupar la Gerencia de la Corporación Mixta de Turismo del Cauca, se presentaron muchas controversias y voces en contravía de quien hasta ahora viene actuando en ese cargo.

Si bien la doctora María Fernanda Bustamante es una profesional en función de su profesión; de turismo no sabe nada de nada, y de gerenciar proyectos sí que peor. Nunca se ha dedicado a lo que debió: diseñar y estructurar iniciativas novedosas y ambiciosos para el Cauca, así como a la búsqueda de recursos financieros para dejar de ser el turismo caucano la cenicienta de siempre.

Parece que nunca fue capaz de elaborar al menos un Plan de Acción ajustado a las necesidades reales de la región; por eso aún no tenemos ni conocemos un producto técnicamente definido para ofertar el turismo caucano ni siquiera a nivel nacional.

Por eso muchos no creímos en su gestión desde un principio, pero como en estas tierras de Dios todo se maneja a dedo y con padrinazgos y caciques políticos, allí tenemos los resultados, que hoy se cuecen en los entes de vigilancia y control por presuntas irregularidades en el manejo técnico, administrativo, financiero, contable y jurídico de dicha Corporación (así dice textualmente un párrafo de informe de la firma Interventora) asignada para algunos de los proyectos y convenios suscritos y con ejecución de gasto por el ente mixto.

Pero, como también nos hemos acostumbrado a que pase lo que pase y no pasa nada, entonces seguirán haciendo fiestas y mucha francachela con los recursos públicos, en este caso provenientes del Sistema General de Regalías S.G.R.

Muy triste, por cuanto el Departamento del Cauca nunca había tenido tanto dinero para invertir en un sector bastante deprimido por situaciones de orden público; pues hoy vemos con dolor que esto termine como el caso de Indeportes, o como el manejo olímpico de los recursos de la salud de los caucanos, o como el ya olvidado caso de nuestro exgobernador González Mosquera, que tuvo el cinismo de salvar su pellejo, pero hundió en la vergüenza pública a más de uno de quienes le avalaron sus caprichos de dictador.

Es grave que el turismo caucano siga huérfano, sin institucionalidad, sin dolientes que se manifiesten y pronuncien por los hechos que ha encontrado SIATEC S.A.S., la Interventora que está realizando su trabajo, pues también le pagan con los recursos en cuestión.

Grave, cuando solo los medios de comunicación se pronuncian, y grave cuando los actores y gremios que pertenecen a este sensible renglón económico no exijan claridad ante estos señalamientos que, como afirmo, son hallazgos de auditorías permanentes y con llamados de atención; pero también se requiere de una instancia jurídica (Gobernación del Cauca) que tome cartas inmediatas en el asunto de marras.

Sin ninguna presunción de que las actuaciones de la señora Bustamante se configuren como delito, cada una de las “irregularidades” que reseñan los informes del Interventor deben de ser explicados con lujo de detalle y documentación bien soportada, aunque, ¿cómo se justifican contratos “sin contrato”?, ¿anticipos de pago sin “entregables” ni informes a tiempo? No sé cómo enfrentará la señora Bustamante estas acusaciones que ya se encuentran en manos de la Contraloría, Fiscalía, Procuraduría, Dian, entre otros órganos de control; pero el que nada debe, nada teme.

Nubarrones vienen para el turismo caucano, y si antes era porque no había recursos, ahora porque había de más.

Esta triste historia, que hace rato se veía venir por las actuaciones tercas y radicales de una gerente sin rumbo, ojalá se constituyan en un nuevo referente para que el manejo de estos temas tan aparentemente sencillos, como lo es el turismo, se asigne a personas competentes e íntegras en sus actuaciones públicas.

Que llegue la justicia, pero que llegue para que el manejo indelicado de los dineros públicos no se vuelva una constante en todos los demás sectores.

Amanecerá y veremos, dijo el ciego… Tienen la palabra la Gobernación (ojalá no la defienda Temístocles, que aún es un gobernador de turno).

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