Los retos del próximo alcalde de Popayán

Por Redacción en diciembre 19, 2015

Por Alberto Muñoz Olano

Termina el año 2015 y finaliza el periodo del actual alcalde Francisco Fuentes, a quien sucederá César Cristian Gómez Castro. El nuevo gobernante local recibe una ciudad que está perdiendo su identidad, atrasada en vías, sin un POT actualizado, con una gran indisciplina, pues todo el mundo hace lo que le da la gana, así sea pasando por encima de los demás, con un centro histórico que poco a poco se convierte en una galería de barrio, y todos sabemos que Popayán sin sector histórico es otro pueblo olvidado en Colombia.

De su antecesor recibirá un plan vial en pañales, una ciudad en obra negra y poco tiempo para terminar el SETPP. Si en el periodo de Francisco Fuentes la comunidad se sintió incómoda por las obras civiles, esto será insignificante cuando empiecen los trabajos de la carrera 9 norte, que es la principal arteria vial de la ciudad y no existen vías alternas para desviar todo el tráfico de las horas pico, de la ya atestada ‘autopista’.

El desorden y la falta de autoridad son advertidas por la comunidad, a través de sus continuas quejas. Crecen y nacen nuevas mafias como los invasores de lotes urbanos conocidos como ‘tierreros’, una práctica que aumenta en la ciudad por ser un negocio rentable para los que se apropian de lo ajeno dejando cicatrices sociales y subdesarrollo por unos cuantos pesos mal habidos.

Constantemente se escucha que esta ciudad se está convirtiendo en el paraíso de lavado de capitales de ‘raspachines’ y ‘lavaperros’, que los dueños de lo ajeno pululan y que al final todo el mundo se lava las manos y culpa al mandatario local.

Pero no todo es malo, actualmente la ciudad goza de un crecimiento comercial sin precedentes, negocios serios y bien estructurados nacen todos los días, el miedo a invertir parece cosa del pasado y la ciudad pujante que se esperaba está despertando.

Difícil tarea le espera al alcalde electo, que deberá organizar la ciudad, que el cambio del que tanto ha hablado, sea realidad. Todos aspiran a que tenga una visión desinteresada y objetiva, que no se equivoque ni se deje asesorar mal, que tenga presente que dentro de dos décadas esta ciudad, perfectamente, podrá llegar al millón de habitantes, por lo que se requiere una infraestructura capaz de soportar lo que se avizora, debe generar sentido de pertenencia en los nuevos residentes, mejorar la seguridad e invertir en recreación, salud y educación que son las bases fundamentales de una sana sociedad.

Ojalá rescate el trabajo desarrollado durante dos años por la Oficina Asesora de Planeación y de otras entidades que la apoyaron en la construcción del nuevo P.O.T. y que el nuevo jefe de esa dependencia trace y proyecte las futuras vías de la ciudad, fundamentales para un desarrollo lógico y correcto de Popayán.

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