¿Campaña política o feria?

Por Redacción en octubre 5, 2015

Editorial septiembre

Definitivamente esta campaña electoral en el Cauca y en Popayán preocupa mucho. En primer lugar, porque de política no tiene nada, es netamente politiquera, no hay ideas, no hay propuestas serias, estudiadas y viables. En muchos casos son algo así como una lista para el mercado. Ciertos candidatos ofrecen, sin ton ni son, lo que la gente desea, con el único interés de ganarse el voto. ¿Y después? Amnesia total.

Asusta, igualmente, la compra de conciencias y, aún más, su venta. Sabemos, por ejemplo, que en barrios de Popayán de estratos uno y dos, están regalando bicicletas y electrodomésticos. Eso nos da a entender la estatura ética del aspirante a gobernar un ente territorial. Como se dijera coloquialmente, si ese es el desayuno, ¿cómo será la cena? En otros estratos ofrecerán contratos, puestos en la burocracia, etc. El ponqué Departamental y Municipal lo están repartiendo sin haberlo horneado. Parece que la plata también se está moviendo como ‘incentivo’ para que la gente acuda a las reuniones con el candidato.

Obviamente que esto es el reflejo de lo que sucede en el país, con el agravante de que el Cauca tiene problemas que en el resto de Colombia no existen, de ahí que no los entiendan. Tan graves, como que la Constitución Política de Colombia en muchos aspectos no es aplicable al Cauca, en especial en cuanto a la igualdad, al respeto a la propiedad privada y el derecho al territorio. Pero los que se hacen llamar dirigentes políticos, senadores, representantes, diputados, concejales, siempre han mirado para otro lado por temor a perder votos, o ser impopulares. No han entendido que el Cauca se está fraccionando, que no hay una unidad en la diferencia, que grupos indígenas que ya tienen en su poder regiones enteras y acabaron con la producción agrícola, están presionando para destruir la agroindustria en el norte del Cauca. ¿Qué dicen al respecto los candidatos y sus jefes, los congresistas? ¿Qué pensarán gobernar? ¿Cómo lo piensan hacer? ¿Cómo van a manejar este caos llamado Cauca? ¿Con qué respaldo político (no politiquero) si no existen partidos, menos aún dirigentes? Los dos partidos tradicionales se pulverizaron, el conservador desaparecerá hasta del tarjetón, más dividido no puede estar, no es cabeza de león, sino cola de ratón, la que apenas se asoma entre grupos variopintos.

Una democracia de verdad necesita de colectividades políticas fuertes, organizadas, con integrantes formados, estudiosos, porque si quieren servir de verdad a su Departamento o a su Municipio, deben estar capacitados y tener suficiente experiencia para manejar la cosa pública. Acceder al Ejecutivo, en donde no dejan huella, y convertirlo en trampolín para sus inmediatas aspiraciones, es de veras deplorable.

La actual, no es una campaña política, sino una vulgar feria de triquiñuelas, de cambio de favores, de prebendas. Aquí se está negociando hasta la dignidad.

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